La sesión de cumple es LA sesión. La más divertida e imprevisible. Principalmente dirigida a los peques que cumplen 1, 2 o 3 añitos, pero no hay límite de edad.
Son sesiones en las que el peque disfruta de una experiencia nueva: ensuciarse jugando con una tarta. A veces les encanta y otras… ¡no tanto! Pero en cualquier caso nos regalan momentos únicos. No se trata de buscar la foto perfecta, sino de captar su personalidad y crear juntos un recuerdo para siempre.