Para mi septiembre es como el inicio de un nuevo año y yo tenía ganas de empezarlo con una nueva imagen, más limpia y más acorde a lo que busco en la fotografía. Fotos más sencillas pero mejor ejecutadas. Fotos que no te canses de mirar. Ha sido un verano muy completo, aprendiendo mucho de los mejores (ya os contaré mi maravillosa experiencia en el Workshop de Anya Ponti), haciéndome a mi nuevo equipo y a mi nuevo estudio.
Y entre tanto, he tenido la oportunidad de fotografiar a familias fantásticas. Los fotógrafos solemos decir eso, pero es verdad, todos los que pasan por delante de nuestra cámara dejan algo en nosotros. A mi estos niños me dejaron una gran sonrisa en la cara. Fue una tarde realmente bonita. Espero que las fotos os gusten tanto como a mi!
Gràcies per tot, familia ;)